La tecnología NFC y sus utilidades hoy en día.

Seguramente en los últimos tiempos habrás oído hablar de las siglas NFC, ¿pero realmente qué significan? Las siglas NFC hacen referencia a su nombre en inglés, Near Field Comunication. Es decir, lo que en español podría traducirse como comunicación de campo cercano.

Es una tecnología inalámbrica de alta frecuencia con un radio de acción muy bajo, por lo que para usarla no podrás estar a más de 10 o 15 cm del dispositivo con el que se interactúa.

La historia de la tecnología NFC no es de ayer, ya que lleva más de una década dando bandazos.

Nokia fue una de las primeras marcas que comenzó con unas pruebas piloto incorporando NFC y después otros fabricantes siguieron su ejemplo, aunque sin demasiado entusiasmo.

Tras su estandarización en 2003, comenzaron a realizarse diversas pruebas de pago con móvil usando la tecnología NFC. Uno de los proyectos de éxito con el uso de esta tecnología se llevó a cabo en 2010 en Sitges, la turística localidad de la costa catalana, en el que participaron 1.500 usuarios y 500 comercios locales.

Este y otros proyectos exitosos dejaron patente el potencial de la tecnología NFC como método de pago seguro.

Uno de los principales intereses que está moviendo tanto a fabricantes como a grandes corporaciones comerciales está siendo el pago desde el smartphone o cualquier otro tipo de dispositivo móvil.

Por ello, hoy en día hablar de NFC es prácticamente hacer una mención a una forma de pago móvil. Las posibilidades de asociar tu dispositivo con tecnología NFC a una cuenta bancaria y usar un simple gesto de tu mano para realizar pagos de forma segura son infinitas.

En 2011 Google presentó Google Wallet, un sistema de pago móvil basado en la tecnología NFC que permite digitalizar las tarjetas de crédito y realizar pagos con ellas a través del smartphone.

Los primeros pasos serios en España con este sistema de pago basado en tecnología NFC los dieron las grandes compañías de sistemas de pago como Visa o MasterCard.

Pero la tecnología NFC no solo se puede aplicar a los métodos de pago. Existen muchos otros usos en los que el NFC puede facilitarte mucho la vida:

– Sincronización instantánea con otros dispositivos inalámbricos, como altavoces o auriculares.

– Uno de los usos más útiles a nivel de usuario puede ser la facilidad para compartir determinada información con otro dispositivo que también soporte NFC. Por ejemplo, puedes compartir un enlace a una página web, tu tarjeta de visita o una foto, con solo acercar ambos smartphones.

– Identificación: Entrar a un gran evento, debería ser a partir de ahora cuestión de pasar por un lector NFC y entrar, sin esperar colas o usar sistemas más complejos que nos hagan mostrar varias identificaciones. Es uno de sus grandes usos. También se puede aplicar a otros establecimientos.

By: Laura Ruiz

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